Durante las últimas tres décadas, la gestión empresarial ha evolucionado desde modelos rígidos basados en jerarquías hacia sistemas más dinámicos y orientados al flujo de valor. En ese contexto surge el Business Process Management (BPM) o Gestión por Procesos de Negocio como un enfoque técnico y estratégico que permite integrar personas y procesos bajo una estructura medible y controlable